Consejos técnicos

   
 
  1) La mejor colocación para el telón de las sombras corporales es la de enrollarlo al techo estirando una cuerda. De este modo no estorba.

2) El proyector de diapositivas tiene una luz muy intensa pero no es muy adecuada para los juegos de "grande y de pequeño"; los objetos puestos cerca de la lente hacen una sombra muy desenfocada. Además, el haz de luz es muy agudo. Significa que, para iluminar un telón grande, se debe poner el proyector muy lejos y, en consecuencia, los efectos de "grande y pequeño" serán obtenidos a cambio de movimientos amplísimos.
   
 

3) Existen los objetivos "gran angular" adaptables a ciertos proyectores: estos resuelven el problema pero son carísimos.

4) Una buena solución son las linternas eléctricas, si éstas son potentes. En este caso, se ha de ennegrecer la parábola interna con la finalidad de lograr una luz verdaderamente puntiforme. La linterna eléctrica colgada con dos cuerdas (para que no gire sobre sí misma) en el techo, evita muchos montajes y los niños podrán correr por debajo sin peligro.

5) Luces muy pequeñas, pero con una luz muy intensa (hasta 100 W) pueden ser las de los faros de los automóviles. Colocando una dentro de una caja de madera con una apertura rectangular delante, se logra un haz de luz quadrangular y, también "gran angular". El problema es que necesitan un transformador, puesto que funcionan con corriente continua de 12 o 24 voltios. Además, no se pueden tocar ya que se fundirían enseguida y porque se calientan mucho.

ó) Las luces indicadas se pueden alimentar con una batería de automóvil. Las representaciones con sombras, por la noche, al aire libre, en un càmping, con una sábana tendida entre dos árboles, pueden ser una experiencia maravillosa.

7) También la luz débil de una vela provoca efectos emocionantes. Sabemos muy bien que la vela encendida es peligrosa, que su luz es muy débil, que primero hace falta habituarse a la oscuridad antes de ver cualquiera cosa, etc. Pero, al menos una vez, es bonito hacer esta experiencia: gracias al temblor de la llama, las siluetas parecen animadas de una manera mágica.

 
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